Para llevar a cabo la estafa de la que están acusados, Máximo Buch argumenta que fue “una compensación contable”. El exconseller Máximo Buch y su socio Ernesto Bernia se acogen a su derecho a no declarar en otra causa que les imputa el desvío de dos millones de euros de una empresa de Gedesco. El juzgado les ha impuesto una fianza de 3 millones de euros, de momento
Redacción Valencia Capital Radio
La pasada semana fue una semana intensa para el exconseller Máximo Buch y su socio Ernesto Bernia que declararon dos veces en los Juzgados de Instrucción en Valencia.
El miércoles 18 octubre, Buch y Bernia fueron llamados como testigos en la causa que se sigue en el Juzgado número 18 en Valencia relativa al conflicto accionarial de Gedesco. En dicha causa, pese a acudir en condición de testigos, sus declaraciones quedaron limitadas por el largo número de causas civiles y penales que Buch y Bernia tienen abiertas por el presunto fraude llevado a cabo durante su gestión en la administración de las filiales de Gedesco.
No obstante lo escueto de su declaración, el exconseller Máximo Buch llegó a reconocer en su declaración como testigo, que él y su socio se habían vendido participaciones de sociedades filiales de GRUPO GEDESCO por aproximadamente 20 millones de euros sin haber realizado desembolso alguno, mediante una compensación contable, cuestión ésta, que se halla sub iúdice en el propio Juzgado número 18.
Por otro lado, el viernes 20 de octubre tuvo lugar su declaración como investigados en la causa seguida ante el Juzgado de Instrucción número 19 de la ciudad Valencia, en la que se les acusa de haber desviado dos millones de euros en la venta fraudulenta de la compañía mejillonera gallega PAQUITO, S.L. (hoy MEJILLONES SABOR DE MAR, S.L.), filial de STATOR, hoy GRUPO GEDESCO. Pese a ser la primera oportunidad que ambos tenían para ofrecer su versión sobre los hechos al Juzgado, que, recordemos, les ha solicitado una fianza de 3 millones de euros, tanto el exconseller Máximo Buch como Ernesto Bernia se acogieron a su derecho a no declarar.
Igualmente, declararon en dicha causa algunos directivos de Grupo Gedesco, que ofrecieron al Juez durante más de tres horas los detalles del fraude cometido, presuntamente, por Buch y Bernia.
De acuerdo con las fuentes consultadas, el modus operandi del fraude perpetrado por Máximo Buch y su socio Ernesto Bernia, se llevó a cabo, aprovechando su condición de gestores de STATOR, mediante la creación de un entramado societario y la interposición de una sociedad personal de ambos, BESKERMING, que actúo como socia de la empresa compradora. Dicha compañía, BERSKERMING, integrada en la sociedad compradora, se llevó una mordida de 2 millones de euros en la operación de la venta de PAQUITO, en la que los Sres. Buch y Bernia actuaron como compradores y vendedores, dada su condición de gestores de STATOR y socios personales de BERSKERMING. De esta manera, consiguieron desviar 2 de los 4 millones de euros en los que se valoraba la sociedad PAQUITO, hurtando la mitad del precio que debían haber recibido los socios PAQUITO, S.L., esto es, la propia STATOR y la familia López Outeiral, que únicamente habrían percibido el equivalente a esa misma cantidad.
La querella interpuesta por el fraude en la venta de la filial de STATOR es uno más de los procedimientos que tanto GEDESCO como STATOR, bajo la dirección de sus nuevos administradores, han iniciado contra sus antiguos gestores por la administración fraudulenta de la sociedad. Ello, pese a los reiterados intentos de Buch y Bernia por entorpecer la acción de la justicia mediante el borrado y destrucción de información de STATOR, que es objeto de su propio procedimiento penal, así como por la interposición de demandas y querellas instrumentales, como la iniciada contra D. Antonio Aynat, consejero delegado de GEDESCO, a instancias de un empleado de Máximo Buch y Ernesto Bernia, por agresión y amenazas y que, finalmente, ha quedado relegada a un mero juicio de faltas por los improperios intercambiados entre las dos partes tras haberse revelado la participación de dicho empleado en el robo y borrado de información de STATOR.
El caso del asalto a GEDESCO por parte de JZI, Buch y Bernia, dio un vuelco al salir a la luz pública que tanto Máximo Buch como Ernesto Bernia firmaron un acuerdo muy lucrativo con el inversor estadounidense para testificar a su favor en su intento de hacerse de forma ilegítima con la entidad financiera española, dirigida por Antonio Aynat y Javier García Escrivá.
El pasado 2 de mayo de 2023, en el seno del procedimiento penal que enfrenta a JZ GEDHOLD, B.V. (mercantil perteneciente al grupo inversor norteamericano JZI, liderado por David Zalaznick) con sus socios industriales en GRUPO GEDESCO, Antonio Aynat y Javier García Escrivá y sus antiguos empleados Miguel Rueda y Ole Groth, salió a la luz el denominado «Acuerdo Transaccional con Liquidación» fechado el día 1 de diciembre de 2022, suscrito con sus testigos en la causa, Ernesto Bernia y Máximo Buch.
Dicho documento fue requerido específicamente por el Juez al conocer su existencia, pues, en él se estipula el pago por parte JZ GEDHOLD, B.V. de un precio a los Sres. Buch y Bernia por su colaboración como testigos en la causa. Dicho precio ascendería a aproximadamente 30 millones de euros al exonerarles de las ventas fraudulentas que han realizado durante su gestión de STATOR y regalarles un 20% del valor de la sociedad.
Los procedimientos de la semana pasada se insertan en conflicto accionarial que enfrenta al fondo de inversión JZI y los socios minoritarios de Grupo Gedesco desde hace más de dos años y que tiene su origen en el concurso de Grupo Ombuds, gestionado por el fondo de David Zalaznick, en el que se promovió la fallida financiación de Grupo Ombuds que alcanzó más de 20 millones de euros de deuda no restituida por las empresas de JZI.
El fondo JZI, que llegó a tener en su porfolio español más de una treintena de empresas, hoy se encuentra en un proceso de desinversión en Europa y España, donde, según se afirma por fuentes del sector, prevé cerrar sus oficinas en los próximos 24 meses.
COMUNICADO REMITIDO POR GEDESCO