El tercer festejo fallero se saldó con el corte de una oreja por parte de Álvaro Alarcón, al quinto
novillo de la tarde. Un astado que tuvo unas primeras arrancadas impetuosas, con fijeza y motor,hasta que bien avanzada a faena dijo basta, cantó la gallina y se fue a buscar las tablas sin disimulo.
Antes de esta renuncia, Álvaro Alarcón le había respondido con firmeza y seguridad, sobre todo en
el toreo por la derecha y en redondo. Cuando se echó la muleta a la izquierda, el de Fuente Ymbro
había cambiado de planes y no quiso colaborar nunca más. Tras un pinchazo llegó la estocada
definitiva y el premio de una oreja. En su primero, Álvaro Alarcón a había dado muestras de su
puesta a punto. Novillero a dos meses de tomar la alternativa, también supo sacar partido de una res
con embestida eléctrica. Siempre con la muleta por pantalla, Alarcón, muy quieto, montó una faena
poco luminosa pero muy trabajada.
Debutaba el francés Lalo de María, torero de envergadura: muy alto, brazos y piernas largas, y rubio dorado de cabello: lejos del prototipo. Singular de hechuras y también de concepto.
Tiene personalidad y a compás abierto, le sacó muletazos al excelente tercero en faena de menos a más. El sexto renunció muy pronto a colaborar y apenas dejó al novillero lucirse. Solo destellos. En el segundo de la tarde, al hacer un quite por gaoneras, fue prendido de forma espectacular,
afortunadamente sin consecuencias.
Muy soso el primero de la tarde y muy quedado el cuarto, no fueron novillos para que el Niño de las
Monjas luciera. Puso voluntad en ambos, sobre todo en el cuarto, al que le porfió muy de cerca.
Pero poco partido había para sacar de ambos.
Ficha del festejo
Novillos de Fuente Ymbro, bien presentados, desiguales de juego. Segundo, tercero y quinto, los
mejores.
Niño de las Monjas: vuelta al ruedo y silencio tras aviso.
Álvaro Alarcón: saludos tras aviso y oreja
Lalo de María: vuelta al ruedo y silencio.
Plaza de Valencia, 13 de marzo. Tercer festejo de Fallas. Menos de media plaza.
Vicente Sobrino